
Desata todos los nudos, con cuidado de no perder las cuentas. Haz un nudo suelto en cada extremo del hilo para evitar que las cuentas se desprendan del mismo. Coge el primer hilo y haz un nudo triple apretado en el extremo para que las cuentas no se desprendan. Retira algunas de las cuentas del otro lado metiéndolas en una bolsa para que no se pierdan. Con una pequeña regla, mide la longitud de alambre que necesitas para tu pulsera. Esta longitud debe ser igual al tamaño de su muñeca -1 cm. Corta el alambre, dejando suficiente longitud para hacer 3 nudos para asegurar las cuentas en el otro lado.






















