Corta 1 m de hilo de coser. Enhebra el hilo en una aguja. Enhebra una cuenta de semillas dorada y fíjala a 20 cm del extremo del hilo como cuenta de apoyo. Para ello, pasa dos veces la aguja por el agujero de la perla. Se utiliza una perla de retención para evitar que las perlas se deslicen al enhebrarlas.













