
Engancha los dos eslabones redondos alineando sus ranuras. Hay que hacer un poco de fuerza para meterlos pero es mejor para que no se caigan.
Para cerrar los pendientes, es muy sencillo:
- Dobla la pieza más pequeña hacia arriba.
- Introduzca el eslabón redondo
- Cierre la parte del pendiente con una pinza plana (con punta de nylon para no marcar el metal)



















