Las perlas Gold Filled tienen una vida útil excepcional. A menudo se compara con la durabilidad del oro macizo en condiciones normales de uso. Este material está diseñado para durar de 10 a 30 años, o incluso toda la vida, si se cuida bien.
Gold Filled contiene 1/20 de su peso en oro de 14 quilates, aplicado sobre una base de latón. El grosor del oro garantiza una mayor duración, incluso con el uso diario. Pero ésa no es la única diferencia entre Gold Filled y chapado en oro. Hemos resumido los principales puntos a tener en cuenta en nuestra ficha técnica.
Las perlas Gold Filled son compatibles con la mayoría de los hilos de joyería, siempre que se elija el diámetro adecuado:
Compruebe siempre el diámetro del orificio de la perla en la ficha del producto para elegir el hilo adecuado. El diámetro del hilo no debe ser mayor que el diámetro del orificio de las perlas.
No, el Gold Filled no se oxida fácilmente. Gracias a su recubrimiento de oro de 14 quilates, este material es muy resistente a la oxidación, el deslustre y la corrosión. Conserva su brillo durante años, incluso cuando se lleva a diario.
Sin embargo, para prolongar su brillo, evite el contacto prolongado con agua salada, productos químicos (perfume, cloro, crema) o humedad excesiva. Una limpieza regular con un paño suave es todo lo que necesita para mantener sus perlas y tubos Gold Filled en perfecto estado.
Nuestro consejo de experto: guarde sus joyas de oro laminado en una bolsa seca, al abrigo del aire y de la luz.