
El larimar, un tesoro del Caribe, se distingue por su magnífica paleta de azules, que recuerda las tranquilas aguas de los trópicos. Esta piedra, apreciada no sólo por su belleza única sino también por sus beneficios litoterápicos, aporta serenidad y armonía, por lo que es una opción ideal para crear bisutería.
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El nombre larimar procede de la combinación del nombre de pila femenino Larissa (nombre de pila de la hija de Miguel Méndez, el hombre que lo descubrió) y la palabra "mar", que significa "mar" en español.
La historia de la piedra no es muy conocida. Se supone que los indios taínos, los primeros habitantes de la isla de La Española (actual República Dominicana), la utilizaban para fabricar joyas y adornos. Pero no hay pruebas de ello.
Según los relatos históricos, el primer descubrimiento reconocido de Larimar se remonta a 1916. El padre Domingo Fuertes de Loren, sacerdote español, solicitó permiso para explorar y explotar una mina de piedra azul que había descubierto en la región de Barahona, en la República Dominicana. Sin embargo, por diversas razones, su solicitud fue rechazada. No fue hasta la década de 1970 cuando esta piedra preciosa fue redescubierta por Miguel Méndez, vecino del pueblo de Chupaderos.
Una pequeña curiosidad: el místico estadounidense Edgar Cayce mencionó la existencia de una piedra azul curativa, utilizada en la Atlántida, con poderes curativos y capaz de favorecer la comunicación espiritual. Sus seguidores establecieron un paralelismo entre su descripción de esta piedra atlante y el Larimar, descubierto en la República Dominicana en los años setenta. De ahí su apodo de "piedra de la Atlántida".
Esta piedra natural se distingue por sus tonalidades de azul, que van del azul cielo al azul verdoso intenso, a veces jaspeadas de blanco, que recuerdan las olas del mar Caribe acariciando las orillas. Cada piedra es única y ofrece una variedad de diseños que las convierten en piezas de joyería exclusivas y personales.
Por su color, a veces se confunde con la turquesa, la crisocola o el jade.
El larimar es una piedra derivada de la roca volcánica. Esta piedra azul es una variedad de la pectolita. En la escala de Mohs, su dureza oscila entre 4,5 y 5, por lo que es relativamente delicada y requiere cuidados especiales para conservar su esplendor. Su densidad oscila entre 2,7 y 2,9 g/cm³.
Única en el mundo, esta piedra azul se extrae en las montañas de la República Dominicana y el norte de Italia. Esta rareza se explica por su particular proceso de formación volcánica, que la hace aún más preciosa y codiciada.

En litoterapia, esta piedra azul calma las emociones, reduce el estrés y aporta paz interior. Aumenta la confianza en uno mismo y la autoestima. Otro beneficio es su capacidad para reforzar la conexión con la naturaleza y la energía de la tierra.
¿Cuál es el chakra del larimar? Se asocia con el chakra de la garganta, el chakra de la comunicación. Trabajados conjuntamente, contribuyen a la paz interior y a la libertad de expresión.
Es la gema ideal para Piscis, Acuario y Virgo.
Atención: nuestras piedras preciosas no se venden para litoterapia. Los efectos de las piedras no han sido probados científicamente. Las piedras naturales no pueden sustituir en ningún caso a los conocimientos o tratamientos médicos.
Al igual que otras piedras naturales, el larimar pierde su vitalidad y sus beneficios con el paso del tiempo. Para recuperar su energía positiva, esta piedra azul debe purificarse y recargarse con regularidad.
Para purificar el larimar, opte por métodos suaves como el agua, la sal, la tierra o el incienso. Por ejemplo, puedes colocar el larimar en un cuenco con agua destilada ligeramente salada. Una vez que lo hayas purificado, asegúrate de secarlo cuidadosamente con un paño suave para evitar rayarlo.
Para recargar el larimar, exponlo durante unas horas a la luz natural del sol o a los suaves rayos de la luna. Para potenciar este ritual, colócalo sobre un lecho de cuarzo o en una geoda de amatista.
Su tono azul pastel combina de maravilla con metales plateados comola plata 925 o elacero inoxidable. Para los que prefieren los tonos dorados, también puede combinarse con acabados dorados como el chapado en oro o el baño de oro, añadiendo un toque extra de elegancia.
En litoterapia, el larimar se considera una piedra calmante. Puede combinarse con una piedra de energía similar. ¿Qué piedra utilizar con el larimar? Para amplificar sus beneficios, combínelo con piedras como la amatista para la serenidad, o la piedra de luna para la feminidad y la intuición.
¿Con qué piedra no se debe asociar el larimar? Por su energía calmante y tranquilizadora, puede no ir bien con piedras con energías muy dinámicas o estimulantes, como la piedra solar o la cornalina.










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